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miércoles, 19 de diciembre de 2012

LA JUNTA QUIERE CONTROLAR EL REPARTO DE ALIMENTOS EN ANDALUCÍA.-

Mucho hemos escrito en este blog sobre la recogida de alimentos y las diferentes campañas que se han realizado en nuestro pueblo por los diferentes colectivos, algunas de ellas con la participación de nuestra asociación o promovidas por nosotros.

También nos hemos hecho eco de la gran SOLIDARIDAD mostrada por los cartameños en este asunto, y hemos publicado algún que otro artículo explicando a dónde van los alimentos que se entregan. Así como la necesidad de seguir ayudando a los más necesitados, y no sólo en actos puntuales como la recogida de alimentos.

Por eso, hoy nos sorprende leer este artículo en el diario ABC de Andalucía, escrito por Pedro de Tena y que también recogen varios medios de comunicación. Juzguen ustedes mismos.

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FUENTE: DIARIO ABC

Griñán y Valderas quieren controlar el reparto de alimentos en Andalucía

La intención del vicepresidente era poner en marcha una especie de Plan de alimentos en el que la pieza principal era la presencia de la Junta.

Uno de cada cinco euros que circulan en Andalucía es controlado por la Junta: nada menos que el 20 por ciento del PIB andaluz. Además, controla la educación, la sanidad, las inversiones y las subvenciones, etc. Ahora, uno de los socios de gobierno, suponemos que con el beneplácito del PSOE, Izquierda Unida, da el primer paso para controlar aún más, incluso el reparto de alimentos en Andalucía que hasta ahora han efectuado las organizaciones sociales. Banco de Alimentos, Cáritas y Cruz Roja fueron convocados a una reunión el pasado mes de noviembre para sondear la posible irrupción de la Junta como autoridad directiva de los próximos repartos de alimentos.

La maniobra, según ABC, parte del coordinador general de IU y vicepresidente de la Junta, Diego Valderas, quien llamó a estas organizaciones para mantener una reunión sobre la realidad de la pobreza en Andalucía. Como sabe todo el mundo, la pobreza andaluza es una de las más agudas de España y el umbral de tal pobreza alcanza el 30 por ciento de la población, cebándose especialmente en la infancia. La pobreza sigue en los mismos niveles tras treinta años de gobiernos de izquierdas.

Esa fue la excusa del principio de la ronda de contactos en la que se desveló la existencia de un Plan de alimentos andaluz que, con la excusa de mejorar la distribución de alimentos en todo el territorio regional, arrebataría la dirección del reparto de las organizaciones sociales y lo dejaría en manos de la Junta.

En la reunión de finales de noviembre, se vio que el objetivo de la reunión no era conocer la realidad de la pobreza en Andalucía. Se sentaron a la mesa el vicepresidente Diego Valderas; el responsable de los Bancos de Alimentos andaluces, Javier Peña; el vicepresidente de Cáritas Diocesana en la comunidad andaluza y secretario general de la delegación de Sevilla, Juan Arredondo, y un responsable regional de Cruz Roja.

Según estos testigos, la intención del vicepresidente era poner en marcha una especie de Plan de alimentos andaluz en el que la pieza principal era la presencia de la Junta en la tarea. Se habló de una partida presupuestaria para 2013 destinada a aumento de la existencia de alimentos en las diferentes organizaciones, pero condicionada a la presencia de la Junta en las asociaciones que ejecutan el reparto.

Dado el clientelismo y el nepotismo existente en Andalucía, las organizaciones expresaron su temor a que iniciativas como la del vicepresidente Valderas condicionara la labor de asistencia con intereses políticos partidistas. La necesidad de una absoluta independencia fue puesta de manifiesto para que las ayudas lleguen a quienes las necesitan y no a quienes convengan a tal o cual partido. No faltó tampoco la memoria de los asaltos a los supermercados protagonizados por un sector de Izquierda Unida, en el que se evidenciaba su interés por el reparto de alimentos y su control.




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