Uno de los objetivos marcados cuando se fundó nuestra Asociación y así quedó plasmado en sus estatutos, fue mantener informados a nuestros vecinos y socios de la actualidad de Cártama y llevar la historia y la cultura del pueblo que nos ha acogido en adopción. La mayoría de los que residimos en nuestra urbanización no hemos nacido en Cártama, por lo que pocos somos conscientes del lugar tan importante donde vivimos y el lugar destacado que ha ocupado en la historia. Sólo, cuando nos sintamos orgullosos de nuestro pueblo y conozcamos su realidad, nos será más fácil reivindicar mejoras, organizar eventos o disfrutar de las fiestas locales.
Inevitablemente, en esa búsqueda de la historia de Cártama, nos encontramos con la figura de Don José González Marín, posiblemente el personaje más ilustre que ha nacido en Cártama, e inevitablemente también, el personaje de González Marín nos llevó a Don Francisco Baquero Luque, vecino de Cártama, cronista y máximo defensor de la obra y vida de este genial artista cartameño, el mejor rapsoda de todos los tiempos, “El faraón de los desires”.
Varios artículos se han escrito desde nuestra Asociación Vecinal haciendo referencia a la vida y obra de este personaje, y conocido es por todos, nuestra postura ante la injusticia que desde el Excmo. Ayuntamiento de Cártama se le ha hecho quitándole el nombre al teatro que desde 1.942 llevaba su nombre. Desde nuestra Asociación hemos pedido en varias ocasiones una explicación, una justificación formal y oficial ante esta injusticia, sin recibir respuesta.
Tal vez, por no ser oriundos de este pueblo, no tenemos el rencor, la envidia o el odio de otros tiempos y que desgraciadamente se ha ido transmitiendo de padres, a hijos y a nietos, y por ello, podemos ver con más claridad y sin contaminación alguna, al artista, al personaje, la obra de González Marín.
Un paso más en esa búsqueda por conocer la historia de Cártama y transmitirla a nuestros vecinos lo dimos ayer, gracias a la mediación de Francisco Baquero Luque y al ofrecimiento de la familia de González Marín, varios miembros de nuestra Asociación pudimos visitar la casa de este genial artista cartameño.
Todos los que asistimos a esta visita coincidimos en varias cosas, una de ellas es el enorme potencial que existe para crear un museo o una gran sala de exposición, no sólo a nivel local, sino nacional e internacional y que forma parte de la historia de España y de Iberoamérica. En otros pueblos, con muchos menos objetos, reliquias y obras de arte, tienen museos simplemente como reclamo turístico. Desgraciadamente también coincidimos en la tristeza y la decepción que nos sobrecoge cuando todo este potencial es olvidado por el Excmo. Ayuntamiento de Cártama y se le da la espalda sin argumentación y justificación oficial alguna.
Nos es imposible transcribir con palabras el cariño y el orgullo con que Isabel, nieta de González Marín, explicaba cada objeto que nos mostraba. Nos es imposible transcribir las anécdotas que encierra cada libro, cada agradecimiento, firma, mueble y obra de arte de este cartameño que llevó el nombre de su pueblo y a su patrona por todos los rincones del planeta y su arte fue reconocido por otros artistas de la época, ministros, monarcas y jefes de estado, sin importar las ideologías políticas de unos y otros, ellos también supieron ver sólo al artista, al poeta y a su obra.
Sirva como anécdota, pero que refleja claramente lo que el pueblo de Cártama esta haciendo a la figura de González Marín, hace unos días realizó esta misma visita una ilustre personalidad de argentina, nieto de cartameños y que había venido a conocer el pueblo de sus abuelos y en especial la casa de González Marín. Cual fue su sorpresa y posterior indignación, al ver que le habían quitado el nombre al teatro y que su pueblo lo había llevado al olvido.
Frase del genial artista y que decía: “Es mi deseo que me entierren de noche, en horas de madrugada, para que no vayan tras mi cadáver los que me zahirieron y mortificaron en vida, por el sólo delito, de haber sido el poeta que más ha cantado la tierra de su cuna”.
Debido a lo limitado del espacio, sólo hemos podido asistir a esta visita un grupo pequeño, muchos vecinos y socios han mostrado su interés en poder visitar la casa de González Marín, deseo que hemos transmitido a sus nietas las cuales se han ofrecido a repetirla.
Nuestro agradecimiento a Isabel y Maria, nietas de González Marín, por abrirnos las puertas de su casa y al amigo Paco, por ese trabajo, la mayoría de las veces ni reconocido, ni recompensado, por transmitir al resto del mundo lo orgulloso que esta de su pueblo.
Estas son algunas de las fotografías de la visita
Todo un lujo disfrutar de una visita inolvidable. Gracias
ResponderEliminarAntonio y Maca
Gracias a vosotros por asistir y sobre todo por valorarla.
ResponderEliminarAMIGOS (mayúscula) de Atalaya:
ResponderEliminarHabeis construído un gran reportaje que, ahora, visionando nuevamente sus motivos e imagenes en la apacible serenidad hogareña, me suscitan emotivos recuerdos y entrañables vivencias, junto a un AMIGO de condición bondadosa y genial artista, de ujn gtiempo pasado que, tengo para mí, fue espiritual, cultural y socialmente mejor. ¡Quietas inoportunas lágrimas mías...!
Recuerdos...Sólo ellos nos pueden dar una visión estática de gratos momentos que nos dejaron en los labios la sed, nunca del todo saciada, de sus frescas ondas. Hoy se reactualizan en mi inerior amores, también el contrapunto del dolor que no duele, vértigos de euforias que contrastan con la actual amargura, punzante, dee la injusta estgulticia de un pueblo que da la espalda, e incluso denosta, a su mejor pasado, cuando Cártama tenía, nada más y nada menos, que sabor a pueblo y que fue jardín de la lira cuyos arpegios inundó las candilejas de coliseos famosos en infinidad de naciones de allende los mares. Esos recueros tienen para algunos, entre los que me cuento, la virtud de alumbrar y ennoblecer el sentido de la vida con ribetes de nostalgias.
Buen comentario literario previo a las imágenes y...ahora, ¡¡dejad que ladren los perros que orillan el camino y pirueteen los bufones y los ignorantes de marras!! Como cartameño, gracias; habeis, pienso, conciencia tornasolada de la historia enjundiosa de este nuestro pueblo. PACO BAQUERO