Publicado hoy en el diario La Opinión de Málaga
Autor Alfonso Vázquez
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El Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 4 de Málaga ha desestimado el recurso interpuesto por Francisco Linares, el exdirector de la emisora municipal de Cártama Onda 8, contra dos acuerdos del pleno municipal.
En concreto, el del pleno del 26 de julio de 2007, en el que se cesaba a Francisco Linares en su puesto de director honorífico, después de que en 2003 hubiera sido prorrogado diez años en su puesto por un decreto de la entonces alcaldesa popular de Cártama, Leonor García-Agua, y el acuerdo de pleno de 27 de mayo de 2009, en el que se ordena al director cesado que se abstuviera de emitir en la radio municipal de Cártama apercibiéndole de desobediencia.
El fallo del juzgado, a pocos días de las elecciones municipales, resalta que no se trata de un nombramiento honorífico «sino de la explotación de un servicio público aparente, al no acreditarse la gestión del mismo por los procedimientos legalmente previstos».
En este sentido, la sentencia resalta que es «claramente ilegal cualquier prórroga en los términos pretendidos» al no respetarse los procedimientos establecidos. Con respecto a la denuncia de persecución política por parte del actual alcalde, el socialista José Garrido, el fallo resalta que al conllevar el título de director honorífico un rendimiento económico del 95% por publicidad, «da indicios de que en su momento Linares fue beneficiario de una prebenda política».
El concejal de Medios de Comunicación de Cártama, Miguel Espinosa, declaró que la sentencia «pone las cosas en su sitio y respalda la actuación del Ayuntamiento de Cártama», al tiempo que resaltó «una campaña de desprestigio por parte del señor Linares» en los últimos años.
«Y hoy queda demostrado que sus pretensiones eran las de seguir enriqueciéndose con la emisora de todos los cartameños», añadió.
Por su parte, Francisco Linares declaró ayer que con el nombramiento de director honorífico, establecido en su día por el Consistorio de Cártama, «la emisora no le costaba un duro al Ayuntamiento y conllevaba que tenía que pagar la instalación, el mantenimiento y los sueldos», de ahí que negara la existencia de prebenda política.
Linares informó de que no va a recurrir la sentencia porque no tiene dinero, ni tiene la fuerza de un partido político» y añadió que en sus años al frente de la radio, Onda 8 «ha sido una emisora abierta a todos», una postura que, destacó, no fue bien recibida por el actual equipo de gobierno.
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