DISCREPANCIAS EN LA ELECCIÓN DE FERNANDO BRAVO CONEJO COMO CRONISTA OFICIAL DE LA VILLA DE CÁRTAMA.-

ARTÍCULO DIARIO EL AGUIJÓN.-
Autor Espartano
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El pasado jueves, día 15 de marzo, el Ayuntamiento cartameño, en sesión plenaria, acordó, por unanimidad, el nombramiento de Cronista Oficial de la Villa, cargo honorifico para el que fue designado Fernando Bravo Conejo, natural del Valle de Abdalajís.


Fernando Bravo es un señor, afincado en Cártama desde hace algo más de un lustro, trabajador en una gasolinera de la villa, como dispensador de combustible, y que en sus ratos libres tiene como afición dedicarse a la investigación arqueológica, utilizando claro está los conocimientos recibidos, no en universidad alguna, sino a base del mucho leer –cuestión que le honra- hasta convertirse en algo así como un historiador autodidacta.

No es una novedad afirmar que Cártama es un municipio con un glorioso pasado y una gran riqueza arqueológica. Sobre su suelo y sus aguas guadalhorzanas han acontecido innumerables hechos de gran relevancia histórica, tierra que ha parido a grandes personajes de talla nacional y universal, lugar visitado por grandes escritores extranjeros que dejaron, maravillados y sobrecogidos, sus crónicas sobre lo que observaron y vivieron.

No es por desmerecer al señor Bravo, pero la pregunta que revolotea, como una alondra en primavera, por el Cerro de la Ermita y el Puente de la Estación, no puede ser más elocuente: ¿Es que en estos tiempos de evidente sequedad cultural no existe ningún cartameño de raíz capaz de desempeñar tal función?



Sinceramente, estoy convencido de que haberlos, haylos, pero hay que buscarlos para encontrarlos. No es tarea fácil, pues los de buena madera, no se pliegan fácilmente a los intereses de los políticos, que tal vez prefieran sumisos Cronistas de Corte, que aguantan las corrientes politiqueras como el junco, que se inclina todo lo que sea menester, pero sin romperse.

Lo más llamativo de este nombramiento es la unanimidad que los ha unido, es decir, tanto unos como otros (PSOE-CPV-PP-IU) han tirado por la calle de en medio, dejando pasar la excepcional ocasión de hacer oficial lo que, a todas luces es oficioso, pues en esta tarea de ser Cronista de la Villa de Cártama, de manera totalmente altruista, hay un cartameño por los cuatro costados, que lleva desempeñando esta función hace más de 50 años: el escritor don Francisco Baquero Luque, quien ha demostrado harteramente la desinteresada pasión por su Cártama natal, habiendo conservado todo un derroche de sabiduría y conocimiento de su tierra, en el acopio vivencial de sus 80 años.

Estoy convencido de que don Francisco Baquero, a quien posiblemente no agrade esta crónica de El Aguijón, seguirá compartiendo sus conocimientos y vivencias en crónicas y libros editados y por editar, mientras Dios le conserve la vida y le mantenga su excepcional lucidez mental.

Jaume Bru i Vidal, eminente historiador, poeta, premio de las Letras Valencianas, cronista oficial de Valencia y Sagunto, decía en la introducción de un libro y referente al estudio de la Historia y el cronista: “Para quien ha vivido su vida dedicado al estudio y a la investigación, dentro de un mundo en el que predomina el materialismo más exacerbado, y en el que las actividades intelectuales son pretéritas, cuando no ignoradas – y, tal vez, en más de una ocasión, hasta despreciadas – siempre resulta reconfortante encontrar personas que, sin el deseo de recompensa material alguna, trabajan calladamente, sin más ambición que la de dejar a sus contemporáneos y a las generaciones futuras el fruto de los conocimientos adquiridos”.

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ARTÍCULO DIARIO EL AGUIJÓN
Autor Gerardo Hernández Les
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ESTUPOR

por GERARDO HERNÁNDEZ LES

Entiendo perfectamente la sorpresa que ha supuesto para muchos el nombramiento de Fernando Bravo como cronista oficial de la Villa en Cártama. Y no creo que esta sorpresa tenga nada que ver con el cuestionamiento de las cualidades morales o intelectuales que le adornen.

Hasta donde le conozco –directamente o por terceras personas- puedo decir que a una persona sin títulos académicos, que vive de un trabajo subalterno, tan digno como cualquier otro, y es capaz de aprovechar su tiempo libre para conocer y profundizar en el estudio del pueblo en el que habita, hay que reconocerle unmérito indudable.

Pero el problema de su nombramiento está en otra parte. El problema no es otro que Cártama tiene desde hace años un cronista contrastado y conocido de todos. Que a Francisco Baquero no se le quiera reconocer oficialmente como tal, no es ningún demérito para él, sino que descalifica a quienes formalmente tienen en sus manos la responsabilidad del nombramiento, al echarse sobre sus espaldas el baldón moral de haber cometido una injusticia, al hacer descansar una decisión de estas características en causas no tanto objetivas como políticas o ideológicas.

Me gustaría que se me creyera que no me mueve a escribir estas líneas un sentimiento de mera amistad hacia Francisco Baquero. Trataré de explicar que se trata de algo mucho más objetivo.

Cuando llegué a Cártama –hace ya casi siete años- lo único que sabía de este pueblo es que era la cuna de José González Marín. Y lo sabía porque en mi época universitaria en Madrid estuve un tiempo relacionado con el teatro, y, además, porque unos años después, en una prolongada estancia en Centroamérica, volví a tener noticias de González Marín (y de Cártama). De no haber sido por estas circunstancias nada habría sabido –para mi desgracia- de la existencia de este pueblo.

Hoy puedo decir que si me siento orgulloso de conocer la riquísima historia que atesora Cártama es gracias a personas como Francisco Baquero, que no deja de regalarnos generosamente un conocimiento vastísimo y un amor profundo por la tierra que le vio nacer. Es gracias a él también por lo que la figura universal (al margen de filias o fobias ideológicas) que ha sido González Marín - sin duda, el personaje más egregio que ha dado Cártama- no esté olvidado para siempre. Olvidado por razones que no tienen que ver con su arte, y sí con otras motivaciones que sus detractores sólo exponen sotto voce y no a la luz del día, para que quienes llegados de fuera, incapaces de entender el secuestro de su figura, pudiéramos darles la razón, si la tuvieren.

Espero que ahora se entienda por qué he hablado de injusticia. Y se verá más claro dentro de unos años, cuando desaparecido Francisco Baquero, las generaciones venideras de Cártama para empaparse del patrimonio histórico-cultural origen de sus raíces tengan que echar mano del legado dejado por este cartameño enamorado de su pueblo.

No me gustaría estar en la piel de Fernando Bravo; pero, si hipotéticamente eso ocurriera, no aceptaría la designación; seguiría acumulando conocimientos acerca de Cártama, y esperaría unos años a que nadie pudiera discutirme el merecimiento de mi nombramiento, porque nadie entre los vecinos vivos de mi pueblo podría, en justicia, hacerme sombra.


GERARDO HERNÁNDEZ LES

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COMENTARIO DE FRANCISCO BAQUERO LUQUE EN EL MISMO MEDIO DE COMUNICACIÓN.-

Me ha sorprendido la publicación del elogioso artículo que firma Antonio Fuentes. No me considero merecedor de tan efusivas loas, pero, no puedo por menos que agrecerlas porque, ello, es lo que corresponde hacer a persona bien nacida, que sí lo soy.

El cargo de Cronista de la Villa ya me fue ofrecido en los años sesenta por el entonces alcalde, Fco Rodriguez Maldonado porque gestioné una biblioteca de 8.000 ejemplares para Cártama a lo que me desplacé a Madrid por mis propios medios; concejales del tenor de los actuales, dijeron que Cártama lo que necesitaba eran chapolinas y no libros y, la biblioteca fue devuelta y acogida en Campillos. Hizo otro tanto el Alcalde, Sevilla Ortega. Después me lo ofreció Pedro Morales Muñoz, pese a que cuando fue oportuno y equitativo le critiqué. El último, Felix Hidalgo Santana, quien con Morales Muñoz, han sido los dos mejores alcaldes que ha tenido Cártama por las obras que llevaron a cabo. Y, sempre rehuí ese cargo: Nunca he pertenecido ni me he amarrado a ningún partido político. Soy un hombre libre.

Dicho lo anterior, aunque la intención de esta chafarrinada es la del agravio comparativo en unos y el afán de medro en alguno, estimo que es de caridad halagar el ego de mi amigo Fernando Bravo Conejo; eso sí, ha dejado claro que para asar su castaña cree legítimo prender fuego a la casa del amigo. ¿Qué otra cosa se puede pensar de semejante cuquimaña?

¿Dónde se ha visto que en un pueblo haya tantos Cronistas de la Villa como partidos políticos que, obviamente, es lo que quieren montar los que forman la Corporación cartameña? Yo he dicho muchas veces que soy desde hace 45 años el Cronista oficioso de la Villa y, a la vista está el resultado. Más de 1.500 artículos publicados en la prensa provincial y algunos en la nacional, decenas y decenas de conferencias fuera de Cártama pero ensalzando siempre a ésta, tres libros y uno en ciernes ahondando en la historia e intrahistoria de mi pueblo, Asociaciones, Una Cooperativa, y gestionado un Instituto, El Colegio de la Mata. la remodelación en su día del de Los Remedios, etc.

En definitiva: Sres. políticos (as), a la hora de proponer otro Cronista de la Villa, echen para uno menos. Yo ya lo soy desde hace más de cuarenta años. ¿No tienen ustedes otras cosas que hacer para el pueblo?

FRANCISCO BAQUERO LUQUE

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NOTA DE PRENSA DEL AYUNTAMIENTO DE CÁRTAMA.-

El Ayuntamiento de Cártama nombra al vecino
Fernando Bravo, Cronista de Cártama.

En Cártama, 20 de marzo de 2011.

El Ayuntamiento de Cártama ha nombrado como Cronista de la Villa de Cártama y
miembro del Cuerpo de Cronistas de esta Villa al vecino de la localidad, Fernando
Bravo Conejo, a través de la sesión plenaria del pasado día 15 de marzo de 2012.

En estos momentos, el trámite del expediente de nombramiento se encuentra en fase
publicación, haciéndose efectivo el nombramiento transcurrido un mes de plazo.

Fernando Bravo, tiene 42 años, es vecino de Cártama desde 1997, y siempre ha
mostrado un especial interés por la investigación de la Historia de nuestra Comarca
y en especial, de nuestro municipio, poniendo siempre en valor el rico legado
arqueológico de Cártama.

Pese a su juventud, Fernando Bravo ya cuenta con un dilatado número de
publicaciones y ediciones de libros, colaboración en programas de difusión de la
Historia del Valle del Guadalhorce, organización de exposiciones, restauraciones de
piezas históricas, etc…

Digno de mención es también sin duda la total disponibilidad altruista que siempre
ha demostrado para prestar su colaboración a este Ayuntamiento en incontables
ocasiones.

Hemos de recordar que Fernando Bravo fue uno de los vecinos homenajeados en la
Gala del Día Andalucía 2012 por su encomiable labor desinteresada en la puesta en
valor de la historia de Cártama.

“Es para nosotros un verdadero honor proceder al nombramiento de Fernando como
Cronista de Cártama, debido a su trabajo y pasión por la historia, la arqueología y por
el patrimonio histórico de nuestra tierra” añadió el Alcalde de Cártama, Jorge Gallardo,
en sus intervenciones en el pleno, así como concluyó “En nombre del Ayuntamiento de
Cártama, quiero manifestar a Fernando Bravo nuestra más sincera enhorabuena”

Por último detallamos algunas de las obras en las que ha participado como escritor y
colaborador Fernando Bravo Conejo:

- La necrópolis ibérica de la Llonguera de Cártama. 4º Congreso Comarcal de
investigadores del Valle del Guadalhorce.

- Benamarquex ó Benamaquís, un pueblo desaparecido: Boletín desarrolla
Guadalhorce. Año 2004.

Colaborador del periódico DAZCUAN en los años 2004 – 2005.

- Casapalma y su señorío, la sombra de lo que fue: Sociedad Cultura
Guadalorcete. Libro del Medievo a la Modernidad. Año 2005.

- Aznalmara, de los orígenes al señorío: Los comienzos de la edad moderna
en el Valle de Abdalajís. Sociedad Cultural Guadalhorcete: libro del medievo a la
modernidad. Año 2005.