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lunes, 28 de junio de 2010

TAN CERCA Y CUANTA ES LA DISTANCIA.-

El pasado 26 de junio, leía en el diario La Opinión de Málaga, un artículo que me hizo pensar lo cerca que estamos de Málaga capital y la distancia que nos separa en cuestión de servicios.

La noticia, hacía alusión a la marcha atrás del Ayuntamiento de Málaga, al no convocar este año las ayudas que venía concediendo a asociaciones vecinales y entidades urbanísticas de conservación para el cuidado y mantenimiento de los jardines públicos. Este año, debido a la crisis, sólo se iban a conceder subvenciones a las entidades urbanísticas y no a las asociaciones. Ante las protestas de éstas últimas, el Área de Parques y Jardines del Ayuntamiento de Málaga, ha dado marcha atrás, y los 250.000 euros que hay presupuestado para este fin, se repartirán entre todos.

Los vecinos de la urbanización Atalaya de Cártama, tuvimos que crear una entidad urbanística colaboradora de conservación, pues esa era una de las condiciones que puso el Ayuntamiento al constructor para poder urbanizar en esta zona. Para el que no sepa que es eso de entidad urbanística, se lo voy a explicar muy rápido. A excepción de las zonas comunes, piscina y pistas deportivas que son privadas, el resto, jardines, calles, aceras y zonas verdes, son públicos, pero el mantenimiento corresponde a la entidad urbanística colaboradora, o sea, a los vecinos que residimos en la urbanización, pagando cada vecino una cuota mensual para dicho mantenimiento. Cuando en las calles de nuestra urbanización se funde una bombilla en las farolas, es de ese dinero de donde se repone, unos 300 euros cada vez que viene el camión pluma a cambiarla. Cuando vais por la autovía y veis los jardines tan bien cuidados y arreglados, pensar que esos jardines, que son públicos, están así gracias a los vecinos. Ha sido la asociación vecinal, la que ha tenido que conseguir papeleras para nuestras calles y es la entidad la que tiene a una persona para barrerlas y recoger dichas papeleras.

Los que residimos en Atalaya de Cártama pagamos los impuestos como cualquier vecino de Cártama, ibi, basura, luz, agua, y a primero de mes, coincidiendo con el cambio de acera en el estacionamiento de vehículos, nos ponen multas como a todos.

Si es cierto, que de vez en cuando viene personal de los servicios operativos a barrer las calles, y también es cierto que el Ayuntamiento de Cártama se hizo cargo de la depuradora, pero el mayor peso en mantenimiento y en gastos, sigue siendo para los vecinos de Atalaya de Cártama.

Por eso, cuando leo esta noticia y veo que en Málaga existen subvenciones para ayudar a los vecinos en el mantenimiento de los jardines públicos, sólo puedo pensar una cosa, cuanta es la distancia que nos separa.

Juan Andrés Vera.-

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